Una salida de emergencia para todo…
Lo mejor es comprar los billetes sin pensarlo, con el
calentón en el cuerpo acompañado de dos frases: "Si lo pienso dos veces no lo hago" y "Hecho!, ya está, no hay marcha atrás…".
No es una huída (aunque en ocasiones lo parezca y
tengas que escuchar a tus amig@s: “Si rompéis una tercera vez te vas a
Australia, ¿no?” o “¿No te habrás enamorado allí?”), es una bombona de oxígeno
para quienes el día a día nos hace sentir la misma presión que los
asmáticos necesitados de Ventolin…
Ahora que estamos en un falso jueves previo a Semana Santa soy consciente de que me quedo sin oxigeno extra,
sin llevar el pasaporte en el bolso, sin sonreír con cara de buena al poli de
turno que te encuentras en la aduana de cualquier país, sin quemarme la lengua
con el café del aeropuerto, sin imaginar las vidas de quienes te rodean
mientras esperas el embarque, sin la tensión de la salida del equipaje…, sin tantas
cosas a las que adoroooooooooo…!!!, pero... es lo que hay por esta vez.
P.D.: Lago Tahoe, destino añadido a la lista de - Viajes pendientes
para esta vida -.