
Mañana se cumplen nueve años de la lección de amor más grande del mundo, de la última clase magistral brindada por mi abuelo…
* Se puede morir de amor, se puede dejar hasta de respirar si la persona que te ha dado aliento durante más de sesenta años se ha ido, se puede abandonar lo terrestre si sabes que algo mejor te espera al otro lado… *
Una semana le costó a él dejarnos, no valieron los ruegos para que esperara un poco más (jamás he rogado, ni rogaré tanto a alguien, imposible...), simplemente siguió a su corazón… Un corazón grande, generoso, fuerte, comprensivo, inteligente, amoroso… Creo que hasta el dieciséis de febrero ese era el único órgano del cuerpo que aún le funcionaba, pero a partir de entonces se lo entregó nuevamente a mi abuela y dejó de latir…
"Contigo aprendí" - Andrés Calamaro
No hay comentarios:
Publicar un comentario