Siempre he dicho que mi casa es mi mundo, cosa que puede sonar muy ET (soy un poco extraterrestre...).
Por eso, cuando vi este cartel en el Barrio de Boca lo tuve que comprar para posteriormente ponerlo en la puerta como bienvenida o advertencia hacia todo aquel que cruzara dicha frontera... Y es que hay mundos en los que te sientes a salvo, en los que andas descalza... Porque una casa no es una cárcel, porque una casa es el refugio más preciado.
Así que ayer lo antes que pude huí una vez más a “mi mundo” y me puse a Jens Lekman para ver si yo también conseguía tener “An argument with myself” .
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