Y aunque la ignorancia en ocasiones es uno de los mayores placeres de la vida… Y aunque la curiosidad mató al gato… Yo siempre he preferido saber y pisar tierra firme en lugar de arenas movedizas, cosa que ayuda también a recordar y a mirar al futuro, aunque éste se pinte complicado…
Sentimientos que saltan como el corcho de una botella de champagne agitada…, mientras das un breve paseo, placentero y lacerante al mismo tiempo, de la mano de una ciudad que no es la tuya, pero a la que perteneces y a la que vas a seguir perteneciendo siempre…

No hay comentarios:
Publicar un comentario